Vinos espumosos todo el año: burbujas para cada ocasión

¿Quién dijo que los vinos espumosos son solo para brindar en diciembre? Cada vez más personas descubren que las burbujas también pueden ser parte de un almuerzo casual, una cita especial o incluso una tarde de piqueo con amigas.

El mundo de los espumosos es amplio, alegre y sorprendente. Hay opciones para todos los gustos: desde los clásicos Champagne hasta los Crémants franceses, pasando por la Cava española, Prosecco italiano y los cada vez más populares Pét-Nat.

¿Por qué deberías abrir un espumoso cualquier día?

Primero, porque van de maravilla con muchísimos platos. ¿Comida criolla? Un brut nature acompaña perfecto unos anticuchos o un tiradito. ¿Algo más ligero? Un espumoso rosé va de la mano con ensaladas, quesos frescos y jamones.

Segundo, porque su frescura y acidez limpian el paladar y hacen que cada bocado se sienta como el primero. Y tercero… porque abrir una botella con burbujas siempre eleva el ánimo, aunque no haya “motivo”.

No todo es Champagne (aunque lo amamos)

Hay espumosos excelentes que no vienen de Francia. El Prosecco, por ejemplo, es ideal para tardes calurosas, por su perfil afrutado y ligero. Los crémants de Borgoña o del Loira son alternativas más económicas al Champagne, pero con técnicas similares.

Y si te gusta lo natural, los Pét-Nat (espumosos fermentados una sola vez y embotellados con levaduras activas) están de moda por su perfil turbio, espontáneo y fresco. Perfectos para días sin reglas.

Tips para disfrutar tus burbujas al máximo

• Sirve entre 6ºC y 8ºC. Sí, bien frío.
• Usa copas tipo tulipa, no flauta. Así se aprecian mejor los aromas.
• No lo guardes para “ocasiones especiales”. Haz del martes una celebración.

Así que ya sabes: no esperes a Navidad. Que las burbujas te acompañen todo el año y hagan más especial cualquier momento.

¿Brindamos?

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